

Cocinar es un juego. Compré unos productos de Play-Doh para modelar plastilina, que aunque no fueron diseñados para la cocina, son bastante versátiles.
Hoy voy a usar uno de mis nuevos adminículos a modo de churrera, para preparar unos churros caseros, y acompañarlos con cajeta, que es el dulce de leche mexicano. Es un dulce a base de leche de cabra, absolutamente delicioso.
Los churros son un invento muy español, que se ha vuelto popular en muchos países de latinoamérica, investigando en la web descubrí varias recetas diferentes, de las cuales tomé algo de cada una para hacer mi propia versión. Encontré también algunas noticias sobre churros explosivos y cómo ganar dinero en el negocio de los churros, todo muy interesante y conmovedor.
Yo por las dudas les publico un link de primeros auxilios para quemaduras, antes de la receta.
Ingredientes:
1 taza de harina
1/2 taza de leche
1/2 taza de agua
1 huevo
1/2 cucharada de aceite de oliva
1/2 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de sal
1/4 de cucharadita de bicarbonato
1/4 de cucharadita de esencia de vainilla
Aceite para freír
Azúcar
Cajeta quemada
Preparación:
Colocar la leche, el agua, la esencia de vainilla y la media cucharada de aceite en una olla grande y calentar hasta que hierva.
Agregar de golpe toda la harina tamizada junto con el bicarbonato y la sal, bajar el fuego y remover con una cuchara de madera hasta que la masa se desprenda del fondo. Cabe mencionar que a esta altura estaremos manejando un engrudo que puede decepcionar a cualquiera, pero vamos bien.
Retirar del fuego, agregar el huevo a la masa y continuar revolviendo hasta que se integre completamente, al principio parece que se corta y que todo está arruinado, pero no, con energía se arregla y se obtiene una masa lisa y muy pegajosa.
Dejar enfriar la masa, introducirla en la "churrera" y formar los churros. Freirlos en abundante aceite caliente hasta que esten dorados. Retirar el exceso de aceite con papel absorbente y espolvorear con azúcar. Disfrutarlos con cajeta quemada o dulce de leche.